miércoles, 16 de febrero de 2011

Deudor.

Dime, querido mío
¿Qué podría ser peor
Que verte brillar con luz propia
Antes de la desilusión?

Cuéntame, en tu sabiduría maya
Que he de hacer día a día
Para mantener bien a raya
La falta de pasión

Escribir sobre el vacío
Sobre monstruos inconclusos
Sobre historias kafkianas
Y deudores irresolutos

Sobre artistas frustrados
Y sobre abusiva obsesión
Sobre flores que se debaten
Entre el sí y el no

Ojos salvajes de bosque
Leve perfume a madreselva
Y en mi cuello de vampira
Tu boca que es una cuerda

Explícame dónde encontrar consuelo
En la leve obsesión diaria
Si se escapan como mariposa al vuelo
Y nunca, nunca me sacia

Porque dime, querido mío
¿Porque no te he conocido?
¿Qué haces tan lejos de aquí
Haciendo mi mundo aburrido?

Dime, querido deudor
¿De dónde sacarás los intereses
Para pagarme los besos
Que me debiste estos meses?